Como había prometido hace un año, aquí unos pequeños consejos para quien quiera empezar a aprender otro idioma.
Primero me gustaría dejar claras algunas cosas, y establecer ciertos
puntos que suelen ser los más influyentes para que una persona abandone el
estudio de un idioma ya sea de forma autodidacta o dirigida.
- Aprender un idioma no es algo que pueda hacerse en poco tiempo.
- Se necesita constancia.
- Seguramente una persona nunca deja de aprender, incluso su propio idioma.
Pienso que uno de los conceptos más nocivos que pueda darse es “aprender
X idioma es muy fácil” o “aprender tal idioma es muy difícil”.
Cada idioma tiene su estructura, sus características y unos requieren
más tiempo que otros. Algunos necesitarán más atención a la pronunciación,
otros a la escritura, etc.
Para aprender se necesita un esfuerzo constante. Si es posible a
diario. No basta con aprender la escritura, o haber escuchado ‘algo’ en dicho
idioma.
Aquí no se debe confundir “difícil” con “imposible”. Si bien puede
llevar tiempo, todos pueden aprender un idioma extranjero.
Para aprender de manera autodidacta, que es lo que interesa aquí, mi
consejo sería:
- Seguir un libro de texto por nivel, y no varios. Hoy en día abunda material de aprendizaje en Internet, y es fácil confundirse cuando para aprender japonés, por ejemplo, seguimos varios libros para principiantes, de varios autores, con una metodología distinta.
- Practicar siempre. Estudiar requiere no sólo adquirir conocimientos nuevos, sino también apropiarnos de ellos mediante la práctica. Si estudias un idioma, hazlo ‘religiosamente’ en un horario que sea cómodo para ti.
- Interactuar con personas que sepan el idioma que quieres aprender. Lang-8 es una comunidad en la que puedes registrarte sin costo, indicando los idiomas que hablas y los que quieres aprender. Con esto puedes empezar a escribir tus ensayos, pequeñas notas de práctica y hablantes nativos te ayudarán señalando o corrigiendo errores.
- En caso de escrituras nuevas como hangul/hanja, kana/kanji, etc., recomiendo que sea lo primero que se aprenda. Si bien la romanización sirve para aprender el sonido o acostumbrarnos un poco a la pronunciación, lo mejor es hacerlo con la escritura propia de cada lengua.
Por mi experiencia, diría que entre japonés, coreano, y chino, cada uno
tiene características y no es muy sencillo decir tal o cual es más fácil.
Coreano es sencillo en escritura, y afortunadamente tiene varios
aspectos que facilitan su aprendizaje (más que español o inglés), aunque los
modos de formalidad pueden llegar a ser algo cansados.
Japonés es un idioma contextual, y tiene una gramática compleja.
Seguramente no se note con frases cortas, leyendo un manga, o textos cortos,
pero en frases compuestas (como en Mahouka, por ejemplo) puede requerir mucha
práctica.
Sus pros es que a pesar de que existe una gran cantidad de kanji, y
lecturas por separado o conjunto, en realidad son menos los necesarios en la
vida diaria, y aunque existan varias lecturas, por lo general sólo se utilizan
una o dos. Monogatari se vale de esto para las bromas de doble sentido, y otras
obras más.
Afortunadamente, la pronunciación es mucho más fácil que el coreano.
Chino es un término general para varios tipos de idioma ‘chino’, como
el cantonés o el mandarín, también conocido como chino estándar.
Gramaticalmente es mucho más fácil que los dos anteriores, y hay ocasiones
en los que se puede cambiar el orden de los caracteres en una palabra sin
alterar la frase. No existen alteraciones por género y número, y la pronunciación
es muy fácil para hispanohablantes.
Hace poco un amigo empezó a aprender coreano por su cuenta, y algo que
es importante en todo esto es tener una
meta, un objetivo claro.
A los que me refiero es que es importante tener una motivación, ya sea
leer novelas ligeras, conquistar pareja, viajar, etc. No es buena idea aprender
‘porque sí’ o para ‘ser/parecer genial’. Sin un impulso es muy fácil que
dejemos las cosas una vez aparezca algo que nos llame más la atención.
Eso es todo. Si quieren saber una opinión más personal, recomendaría
mucho aprender coreano. Hangul es un sistema de escritura superior y fácil de
aprender, y la pronunciación, con tiempo, es fácil de dominar. Hay mucho
material para aprender de forma gratuita, y si es por novelas ligeras, muchas
son traducidas al coreano, y ahora hay varias originales en ese idioma. Baccano
y Vamp traducidos al inglés son una traducción coreano-inglés, y entre la
traducción japonés-coreano se pierde mucho menos que en la japonés-chino por
ejemplo.